No quiero extenderme mas. Cedo la palabra, por tanto, a Jaume Rovira, a quien aprovecho para agradecer su amabilidad por enviarnos el texto que sigue. Habla el maestro:
Sigo caminando, llego a la Pedrera, y la misma escena, turistas y más turistas. El edificio después de la limpieza a que ha sido sometido, está magnífico, parece una gran planta de piedra blanca crecida allá mismo. Estoy llegando a la calle Roselló, camino unos pasos y ya veo un grupo de gente, compruebo el número...sí, es aquí.
Pocos y mayores. Conozco algunas caras, pero no las identifico todavía, aquí tiene que haber gente de la redacción, comerciales, de máquinas...Bruguera llegó a tener más de mil empleados.
Ahora sí veo a Jan, me acerco a él y me identifico, me temo que será la mañana del “¿te acuerdas de mí?” Hablamos, tiene dificultad en comprenderme, sé que no vocalizo muy bien, al final me da el periódico y me dice que le escriba allí. Breve diálogo, le digo si quiere tomar una café y me señala el reloj, que la cosa tiene que comenzar a las 12 y ya van tarde.
Yo sí necesito un café, así que me voy a la cafetería de la esquina. Al salir, el grupo ha crecido.
Mucha gente y dos azafatas en la puerta. Allí veo a Ibañez hablando con una mujer. Voy hacia ellos:
-“¡Hey, Ibáñez! ¿Cómo estás?..”.
- ¡Hombre! ¿Qué tal? ¿Cómo vamos?...
La mujer me dice:
-¿Te acuerdas de mí?...
- Me suena tu cara, pero ...perdona, ahora mismo ...
Sin dejarme acabar la frase, la mujer abre el bolso y saca una foto en blanco y negro: Un grupo sonriente sentados en la redacción de Bruguera, identifico a Julio Fernández, Montse Vives ¡y a ella¡
-¡Dios! Sí, claro que me acuerdo....Look de los 60, y qué jóvenes éramos...
- Sí, ya ves ¡con 40 años menos!...
Saca más fotos: Matias Guiu, Perich, Julia Galán...Volvemos a hablar con Ibáñez...
- ¿Sabes quién se puso en contacto conmigo via mail ? Jordi Bayona...
- ¡Hombre!- dice Ibáñez-. Yo me lo encontré no hace mucho en un acto....Bueno, cuando digo no hace mucho, quiero decir que igual hace siete o nueve años, porque de todo hace siete o nueve años, ¡ja, ja! ... Sí, hasta nuestro hijos ya son del siglo pasado!- Ibáñez señala-.Mira quién viene por aquí!...
- ¡Vaya, si es Bayona!...¡Joder, justo hablábamos de ti!...
- ¿De verdad?...
- Te lo juro, no sabía que venías...
Nos da la mano a los dos...Tengo la impresión de que, por arte de magia ha aparecido la jerarquía de nuevo, Bayona era el segundo de a bordo, la mano derecha de Gonzalez, y para mí, una especie de guía espiritual dentro de la Editorial...No, falsa alarma, Bayona es de aquellos jefes que se hacían respetar de manera natural...posiblemente porque él respetaba a los demás... Hablamos animadamente ...Le digo:
- ¡Has matenido tu tipo!, siempre de figura tan delgada y fina y ese aire austríaco!
- ¡ Ya ves!...
- Y con lo que llegabas a fumar, siempre con el Ducados en los labios...por cierto, Ibáñez, ¿ tú has dejado de fumar?....
- Sí, el 2007, un día dije basta, y se acabó....
- ¡Joder! Yo también lo dejé el mismo año....
- Yo el noventa y tantos- apunta Bayona-. Después de un susto....Bueno, de todas maneras ya hemos fumado todo lo que teníamos que fumar, podemos decir con orgullo, que cumplimos....
Entramos en el edificio, hay un patio al final del pasillo, muchísima gente. Seguimos hablando entre nosotros, ahora jugamos a identificar gente..."¡Mira aquel! ¿No es tal?...¡Joder, qué mayor está!!...¡Pero si tiene mi edad!!...”Se acerca Ramis, saluda al maestro Ibáñez, se abrazan, nos abrazamos...
-¿Cómo estás, hombre?...¡Hosti! Te veo cachas,tío, con lo delgadito que estabas...-Bayona no lo conoce.-.Este era de los más jóvenes y más buenos- añado.
-No te creas- corta Ramis-, ¡ya voy a cumplir los 48!...
Ahora quien entra en el grupo es Enrich, va directo a Ibáñez y lo abraza, se saludan, luego nos mira a Bayona y a mí y no nos reconoce. Ibáñez le explica quién es Bayona. No acaba de ubicarlo, luego de mí, tampoco , alguien dice: “Segis y Olivio”... “¡Aaaah!” Ahora es Ramis quien dice no conocer a Enrich...Yo digo:
- “¡Montse, la amiga de los animales!”...
- ¡Ah, clarooo! ...
- Y el Caco Bonifacio- añade Ibáñez.
Entra Carrillo un poco despistado... Propongo hacer una foto, se lo pido a De Cos y le doy mi móvil...Cojo a Bayona e Ibáñez por el hombro, mirada al frente... De Cos quiere hacerlo bien y tarda un poquito en encontrar el ángulo...Carrillo comenta:
- Coño, ¿Nos van hacer la foto con un móvil?...
- No hombre, que esa no es la foto oficial, que es mi móvil!
¡Aah!.... Llega Manolito, el hijo de Vázquez, saluda a todos. Le comento a Bayona:
-¿Has visto cómo se parece a su padre? Y tiene las mismas facciones de cara, el mismo color de voz!
Movida en el patio, nos dicen que nos pongamos de espaldas a la pared...casi todos despistados... ¿qué pasa? Vemos delante nuestro una hilera de fotógrafos que comienzan a disparar sus flashes hacia nosotros. Algunos todavía están al otro lado. Le hago una señal a Bayona para que se acerque, lo hace a paso ligero, cruza la frontera....siguen disparando flashes. Ramis, que está detrás mío ,comenta:
-¡Joder, tengo la sensación que nos van a fusilar!
Y Vázquez:
-¿Y yo qué coño hago aquí si solo soy el hijo de Vázquez?
Le digo:
-Mejor ser el hijo que el padre,en este caso, ¿no has visto qué caras pintan por aquí?
Otro dice: “¡Vaya muestrario!...Yo digo: “Bueno, ya casi monstruario!”. Y de repente me doy cuenta que estamos jugando al juego que habíamos utilizado en los viejos tiempos, y que era fuente de un estilo de guión: jugar con las palabras, utilizar la fina ironía o el sarcasmo, según el caso, engrasar continuamente la creatividad jugando con las palabras, dándoles una vuelta y otra,. Y recordé los , para mí, mejores en esas artes: Matías Guiu, Vázquez, Perich, Figueras, Jesús de Cos, Jaume Ribera.....
- Nada, él se desvinculó muy pronto de todo esto.
Yo añado:
-La última vez que lo vi fue en el funeral de Raf...
Alguien se gira pidiendo silencio...Habla el editor del libro, después Juan Bruguera, que se identifica como el hijo del último Bruguera y nos cuenta la historia de la familia, muy interesante. Ahora es Antoni Guiral quien habla, nos cuenta de manera amena y divertida la génesis del libro. Satisfacción en la sala, el autor lo tiene fácil, el público está totalmente entregado: somos público y protagonistas a la vez...Se está contando la historia de Bruguera, la editorial, todas las etapas...
Bayona me hace señal, me inclino....nos dice:
-Sí, aquí se habla de mucho, pero del final nadie dice nada...
Ibáñez: "Aquello fué tremendo".
Bayona: "Nos pagaban un fijo de 25.000 al mes".
Ibañez: ¡Coño, a nosotros nada!
Yo: No recuerdo cuántos meses trabajamos sin cobrar, tenía que entregarle lás páginas a Matías Guiu en el Metro de Lesseps, porqque habían piquetes en la puerta de Bruguera....¿Cuántos meses duró aquello?Creo que fueron nueve....¿Y los cabreos de Raf?...Bueno, al menos a mí me lo pagaron todo cuando entramos en Ediciones B....
Algunos de la fila anterior giran cabeza, con la misma expresión de antes: ¡Chist!.... Pero los parlamentos se están terminando...Aplausos, turno de preguntas... Sale inevitablemente la nostalgia, más que preguntas parecen evocaciones de un pasado feliz..."¿Por qué la gente no lee ahora tebeos?” “¿Qué tirajes había en los 60?” “¿Ah, es un secreto?” “Bueno, ningún editor dice exactamente la verdad”.....Le doy con el codo a Carrillo:
-Venga, tú, que tienes buena voz, pregunta algo....
-¡ Claro que voy a preguntar!-Levanta la mano, Guiral le cede la palabra- ¿Cuántas páginas tiene el libro ,cuánto cuesta y si nos van a regalar uno?
Guiral contesta:-¡ Ah, una pregunta práctica por fin!... Comenzando por el final, claro que os vamos a regalar un libro... tiene unas 120 páginas y cuesta unos 23 euros....
Carrillo, más serio que antes, levanta aún más la voz y responde: -¡ Pocas páginas, muy pocas páginas! Y demasiado barato, no se puede vender un libro tan barato!
Risas. El Editor aprovecha para apuntar: " Todos los libros son siempre baratos por lo que cuestan...”
Bayona me hace una señal, me inclino, apunta hacia las primeras filas, alguien que acaba de llegar y que está junto a la pared:
-¡Mira! ¿No es Victor Mora?
Ibáñez dice: Yo diría que sí....
Bayona se levanta rápidamente, yo le sigo, nos acercamos al entrañable maestro, que está sentado en su silla de ruedas, muy delgado y pálido, pero sonriente. Recuerdo la última vez que lo vi, por televisión, en una entrevista un posterior a su accidente vascular, y tenía una gran dificultad para hablar, aunque su mente se intuía intacta.... Bayona, que es hombre más bien frío y poco efusivo, se inclina sobre el maestro y le dice:
-Víctor, ¿te acuerdas de mí?
Él abre los brazos y lo abraza: “¡Jordi, qué alegria verte!”
Observo que habla un poco fatigado, pero sin ninguna dificultad...Me mira de reojo. Yo también me inclino y le hago la misma pregunta:
-¿Y de mí, te acuerdas?- Parpadea un poco y busca en su memoria.- Trabajé con usted en el TBO, Obseso Pisafondo...El hombre abre los brazos :
-¡ Ay sí, noi, me alegro mucho de verte!- mientras me abraza, continúa- ¡Mucho, mucho!
Estoy impresionado y conmovido, no sé que decir...oigo murmullo de voces detrás mío, me giro , está todo el mundo allí, ha corrido la voz que Víctor Mora ha venido y todos quieren saludarlo...Entre saludos el comenta:
- No, mi mujer no ha podido venir, no se encontraba muy bien esta mañana y se quedó en casa...
Su mujer es Africa, una de las pioneras en la redacción de Bruguera, es realmente una lástima que no esté aquí.
Me acerco a Guiral, a quien no conozco personalmente, mientras de pie está firmando ejemplares del libro. Cuando llega mi turno, me presento:
-Hola, soy Rovira, quería felicitarte por todo lo que llevas haciendo y...
-¡Hombre, Jaume Rovira, tenía ganas de conocerte, qué alegría!
-¿Tú trabajaste en Bruguera?-Le pregunto.
- No, yo trabajé en Ediciones B, pero ya en los 80 y tantos...la afición a los tebeos me viene por mi padre y...
Alguien se ha plantado junto a nosotros, viene a preguntarle algo a Guiral, me suena su cara pero no sé quién es....Guiral nos señala a los dos: “¿Os conoceis?” Repetimos lo mismo: “Me suena su cara pero no...”. “Alfonso López, Jaume Rovira, Jaume Rovira, Alfonso López....” “¡Hombre! Raro- raro pero no no conocíamos personalmente.
-Yo creo que empezé antes que tú- dice Alfonso.
-No - corta Guiral-, tú comenzaste el 74 y Jaume el 70....
-¡Vaya! ¡Ya salió el historiador!...
Mientras Guiral me dedica su libro: “ A Jaume, por todos los buenos momentos que me ha hecho pasar”.....Alfonso me coge por el hombro y me pregunta:
-¿Cómo te va? ¿ Tienes trabajo?
-Bueno, hace años ya que trabajo en el mundo de la Animación y...
Me suelta como aliviado:
-¡ Menos mal! Entonces, tranquilo...
-¡Hey, hey, no te creas!
Con la bolsa de libros que nos han dado, el libro más un par de álbumes de los últimos Mortadelos, comienzo a despedirme de la gente, la mitad ya no están. Saludo a Julia Galán, dos besos.:
-¡Me gustaría- dice-, cada semana una fiesta como ésta, para que vinieran los hombres a besarme!... También de la amiga de las fotos.
Me despido de Manolo de Cos, hermano de Jesús, que ha organizado el evento y al que todo el mundo quiere...
Y me acerco a Manolito Vázquez que está hablando animadamente con Ramis...me coge por el hombro y le dice a Ramis:
- ¿Sabes que estamos trabajando juntos en un proyecto de animación sobre el personaje de Vázquez?
-¿Ah sí? ¡Me alegro! Cuenta...
Contamos....le pregunto a Ramis qué está haciendo ahora:
-Estoy cada vez más alejado del cómic, ya no hay casi nada...
-¡Dios! ¡Qué desperdicio de talento, qué lástima!
Vázquez nos cuenta que trabaja de realizador, y también dibuja, pero nada que ver con los dibujos de su padre, otras cosas...
Y una confidencia. Ramis le dice a Vázquez:
-¿Sabes que tu padre un dia me dijo que a ti te gustaban mucho mis dibujos?...
-Sí, sí, claro que lo sé, es que es verdad, me encantaban tus dibujos, y a mi padre también. Un día, mientras él estaba dibujando una pàgina me llamó y me la enseñó: mira Manolito que he dibujado en esta pared; un cuadro estilo Ramis.....
-¡Hostia! Pues no sabes la ilusión que me hace oír eso ahora!-Dice Ramis-. Y la ilusión que significó para mí aquellas palabras de entonces...
Manolito nos coge a los dos y nos dice:
- Oye, me gustaría mucho que vinierais esta noche al estreno de la película sobre mi padre, os voy a enviar las invitaciones por mail. Y vamos a estar más en contacto...¿Facebook? ¡Os voy a agregar!
Salgo a la calle con la sensación de haber vivido unos momentos únicos, singulares, divertidos y muy emotivos.
Sin embargo me ha sabido a poco, estoy seguro que hubiéramos podido hablar mucho más...Hay todavía tantas cosas, tantas informaciones que podríamos intercambiar...
Quedan tantas preguntas...
La sensación también, de pertenecer a un extraño club donde ya no puede entrar nadie más, pero sí desaparecer progresivamente, es decir, ¡una auténtica, singular y única especie en extinción!
Todo un mundo perdido, un mundo con sus luces y sus sombras, pero en definitiva un mundo maravilloso, o mejor un universo, donde algunos hemos tenido el privilegio de vivir y disfrutar desde los dos lados: como lectores y como autores, transversalmente, porque no hay un solo autor, que no haya sido antes un gran lector.
Y normalmente, los lectores llevan un extraño virus contagioso que provoca que haya más lectores...
¿Seguirá vivo este virus?
Vuelvo al principio, a la Feria del Libro de Ocasión del Paseo de Gracia.
Sí, parece que el virus sigue vivo.
Jaume Rovira
Gracias de nuevo, señor Jaume Rovira, por su amabilidad y generosidad...
Que no nos vacunen nunca contra este virus...