domingo, 16 de noviembre de 2008

EL PILOTO ROMPETECHOS (O LA SABIDURÍA DE LAS ABUELAS)

Dicen que de casta le viene al galgo.
Y debe de ser así, porque mi abuela materna era una empedernida lectora de tebeos bruguerianos. Carpanta, Zipi y Zape o Las hermanas Gilda constituyeron una de sus principales (tal vez la única) fuente de diversión y entretenimiento en los duros años de la posguerra. Fue ella la que, en aquellas mágicas noches en que los padres de uno iban a visitar "a un señor que está enfermo" (por seguir con las referencias bruguerianas) me ilustraba con entrañable cariño las hazañas de algunos de estos héroes de papel. Por su pervivencia en el tiempo, ciertos personajes eran compartidos por ambas generaciones, como Zipi y Zape, que no necesitaban presentación. De otros, sin embargo, tuve la primera noticia gracias a mi abuela, como es el caso de Petra, criada para todo.



En una de estas maravillosas noches, un servidor, siendo un niño ávido de compartir experiencias tebeísticas transgeneracionales, le pregunté a mi querida abuela por algunos personajes de Ibáñez, como el caso de Rompetechos. Ella se quedó pensativa, mirando, y dijo:


-"Sí, lo conocí, pero al principio ese personaje era un piloto de aviones".


Yo me quedé fascinado ante el profundo saber y conocimiento de mi abuela, a la vez que imaginaba lo hilarantes que debieron de haber sido esas historietas de un Rompetechos primigenio que, sin duda, debió estrellar más de un avión, dadas sus facultades visuales.


Pasaron los años, uno fue creciendo y, con el tiempo, se convirtió en un modesto conocedor de la obra de Ibáñez. Así, recordé en más de una ocasión las palabras de mi abuela y no pude evitar ese sentimiento de impúdica superioridad que, en su día, tiene todo adolescente frente a las generaciones anteriores. Yo había investigado acerca de la obra de Ibáñez, conseguido varias antologías del querido cegatón y en ninguna el personaje fungía como piloto aéreo, al menos no como profesión fija. Los escritos al respecto por parte de los investigadores tampoco parecían ir en esa línea.



- "¡Pues vaya! ¡Menuda trola me colocó en su día mi abuela!"- era el pensamiento inevitable.


Pensé, incluso, que debía de haberse inventado el dato y que me había contestado aquello por salir del paso. Sin embargo, partiendo de las investigaciones de Miguel Fernández Soto, quien dice en El mundo de Mortadelo y Filemón que el nombre de "Rompetechos" parece estar sacado de algún personaje del cine mudo, me puse a investigar. Efectivamente, no existe ningún personaje del cine mudo con ese nombre y el dato, como asegura Fernández Soto, ha de ser manejado con prudencia.





No obstante, sí di con una película alemana de 1941, dirigida por Kurt Hoffmann titulada Quax, Der Bruchpilot, que se tradujo en España como Quax, el piloto Rompetechos. ¡El piloto Rompetechos! ¡El dato que me había proporcionado mi abuela hacía más de dos décadas!




Partiendo de esta línea de investigación, encontré una entrevista de 2003 en la que Ibáñez habla abiertamente del origen del nombre de su personaje:

"Cuando trabajaba en Bruguera el dueño vio una película americana [en realidad era alemana] con un piloto alto y largo que le llamaban Rompetechos y me obligó a bautizar así a un personaje. Obedecí pero le cambié el personaje totalmente" . Pueden leer la entrevista completa en www.drac.com/cac/200304/20030416.html


Efectivamente, el piloto Rompetechos existió, encarnado en la figura de Heinz Rühmann , que vemos en las fotografías de este tema. Parece ser que mi abuela, aunque mezcló recuerdos, no andaba tan descaminada después de todo.


Un poquito más humilde y mucho más agradecido, la saludo desde aquí y le doy las gracias por tantos ratos de diversión al calor de un buen tebeo.

15 comentarios:

Víctor 1988 dijo...

Un artículo interesante. A mí también me picaba la curiosidad de dónde venía el nombre de Rompetechos, y Miguel Soto me dio una pista en su libro.

Me gusta bastante ese personaje, con el que comparto la miopía.

Bigotito dijo...

Innnnnnteresante . Muy agudo , es realmente interesante este post. Yo pense que el nombre de Rompetechos fue un nombre original ( como el de Mortadelo) pero veo que incluso los grandes maestros se insperan para su obras. Saludos.

Chespiro dijo...

Gracias a los dos por los comentarios. Cosillas que van saliendo con la investigación.

Anónimo dijo...

Enhorabuena una vez más por tu interesante hallazgo, y por lo bien que lo cuentas. Una vez más has logrado sorprenderme.

Chespiro dijo...

Gracias,Señor Ogro. Siempre es un placer.

Don Guri dijo...

Me quito el sombrero ante tu abuela, Chespiro.

Chespiro dijo...

Jaja, se agradece, Don Guri. Yo hago lo propio.

JuanAnt.Noé dijo...

Anonadado!!! Parece increible que siempre haya una sorpresa relacionada con la obra de Ibañez a la vuelta de la esquina... y vaya sorpresa!!!
Excelente entrada, amigo Chespiro!

Chespiro dijo...

Gracias, amigo. Me agrada ver que os interesa.

Bigotito dijo...

Chespiro, pasate por mi pagina y mira el post del Super, es muy interesante.

Migsoto dijo...

Bravo, amigo Chespiro. Al final se ha conseguido averiguar que, después de todo, Ibáñez tenía razón en esa frase que no conseguíamos descifrar.

Chespiro dijo...

Pues sí, no estaba el hombre tan despistado en esta ocasión.
Me alegro de verte por aquí. Saludos.

Comiquero91 dijo...

La sabiduría de las abuelas, muy buena entrada, un gran descubrimiento.

Anónimo dijo...

Enhorabuena por el blog, muy interesante. Me permito el lujo de añadir la información en el artículo correposdiente de Rompetechos en Wikipedia.

http://es.wikipedia.org/wiki/Rompetechos#Creaci.C3.B3n

Chespiro dijo...

Estupendo, me alegro de que la información haya resultado interesante.